AVENGERS vs X-MEN: Estilos de Liderazgo – Stark y Xavier (1 de 3)

Dentro de la saga de Mutantes, se destacan dos grupos: los X-Men y la Hermandad de Mutantes que representan polos en teoría opuestos ante la problemática de la diferencia. A lo largo del desarrollo de los personajes y los grupos, esta polarización suele invertirse e incluso diluirse.

Antes de entrar de lleno con las comunidades de mutantes, quiero hacer un puente con los personajes que hasta aquí se han trabajado en el blog, fundamentalmente el equipo de Avengers. Para llevar a cabo esta comparación, tomaré la anécdota (del cómic y del MCU) de Civil War y el choque entre el liderazgo de Tony y Steve ante el riesgo que representan los superhéroes para la comunidad de naciones. Al igual que los mutantes, se ven cuestionados ante la sociedad por ser diferentes.

En el momento que ocurre la Guerra Civil entre Tony y Steve, los Avengers se encuentran ya consolidados como grupo. Al igual que los X-Men, se trata de una familia de seres extraordinarios potencialmente alienados que encuentran en sus grupos una pertenencia que le da sentido a sus solitarias existencias. Los líderes de ambas organizaciones (como ocurre en todo grupo) representan ciertos ideales con los cuales los individuos se identificarán. Freud planteaba que en los grupos, los individuos se cohesionan atribuyendo al líder su ideal del yo, por lo que esta figura se transforma en una imagen idealizada lo cual le permite mantener un liderazgo y una autoridad frente al grupo.

Tanto Tony como Charles, Steve y Erik buscan lo que creen es lo mejor para su equipo. Los cuatro terminan siendo proteccionistas hacia sus seguidores, asumiendo una responsabilidad como líderes. Tony y Charles provienen de orígenes privilegiados y tuvieron infancias acomodadas al interior de una familia. Si bien ambos son huérfanos y presentan sus conflictos con sus figuras familiares (paternas, maternas y filiales) provienen de un sistema continente que les dio en su momento pertenencia. Steve y Erik nacen en familias en condiciones precarias y quedan huérfanos a muy corta edad. En el siguiente post trabajaré a estos dos personajes.

Regresando a Tony y Charles. Ambos son fundadores de sus grupos: X-Men y Avengers. Charles es creador, fundador y patrocinador de los X-Men. Esto lo coloca en un liderazgo casi omnipotente ya que él solo recluta y entrena a sus discípulos y traza las reglas desde las cuales deben operar los X-Mex. Tony en cambio ha compartido el liderazgo con Steve desde el inicio y ambos han sido a su vez acompañados por Nick Fury. Como el mismo Tony expresa en Era de Ultron “Él (refiriendose al Cap) es el jefe. Yo solo pago todo y hago que todos se vean cool“.

Charles por su parte, si es el jefe. Él supone que deben mantenerse ocultos y utilizar sus poderes discretamente utilizando identidades secretas que les permitan una doble vida. Por una parte son una escuela con apego a la realidad establecida y se hacen pasar por humanos normales, pero la escuela es la fachada de un cuartel de superhéroes que utilizan sus habilidades para proteger a la humanidad. En este sentido, Charles se coloca como un patriarca que sostiene saber lo correcto y sostiene una empresa narcisista que tiene que ver con demostrar que los Mutantes no solo no son un peligro sino que son benéficos para la raza humana.

El narcisismo de Xavier en este sentido se consolida en un sentido moral. Él realmente cree tener las respuestas correctas y asume que los humanos no son capaces de aceptar las diferencias por lo cual lo mejor es ocultarse para evitar ser perseguidos y a la vez utilizar sus poderes para demostrar su utilidad para la raza humana y a la vez su bondad. Si, al Profesor X le importa mucho establecer un estatuto moral de bondad y para ello requiere el reconocimiento de los humanos representado en sus instituciones: el gobierno de los Estados Unidos, la CIA y la ONU.

En contraste Tony, cuyo narcisismo ya he trabajado en otro momento (IRONMAN: La construcción de una coraza narcisista para lidiar con el trauma. (1 de 4)) no pretende en ningún momento protegerse en el anonimato. Los Avengers funcionan como una empresa neoliberal conocida por todos haciendo cierto alarde de grandiosidad pero también adueñándose de lo que son: vengadores conocidos bajo la luz de los reflectores. Justamente en Civil War, (principalmente en la versión del MCU aunque también en el cómic) esta exposición los pone en entredicho con los acuerdos de Sokovia. Tony esta a favor de aceptar estos acuerdos que implican limitar la omnipotencia con la cual se han manejado hasta ese momento. Lo que él busca es la contención de una institución que asuma la responsabilidad de regularlos.

Aquí habría un punto de encuentro entre Ironman y el Profesor X: ambos buscan adaptarse y para ello admiten la necesidad del reconocimiento y la regulación de las instituciones. Sin embargo, sus posturas proceden de motivaciones distintas. En Charles, se juega su necesidad de reconocimiento narcisista, mientras que en Tony se juega la culpa y la necesidad de que otro asuma la responsabilidad de la toma de decisiones casi a manera de castigo.

Lo anterior se cristaliza en la manera como ambos buscan proteger a sus féminas monstruosas: Jean Grey, Raven y Wanda. Ambos deciden que ellas deben ocultarse para poderlas proteger. Esto implica limitarlas y forzarlas a reprimir sus poderes. Este acontecimiento me parece de singular importancia ya que representa la típica postura patriarcal hacia los peligros de una feminidad desbordada y destructiva. Foucault en Vigilar y Castigar, trabaja este tema en términos de cómo la humanidad ha debido construir sistemas que le permitan tener el control de las cosas que no puede entender y le causan temor. Jean, Raven y Wanda son mutantes poderosas: Jean y Wanda son incluso capaces de destruir la existencia (en los cómics ambas son causantes del exterminio en mas de una serie) Raven al poder mimetizarse es capas de engañar a cualquiera. El temor que provocan justifica que sus mentores tengan que reprimirlas. Charles elabora intrincados bloqueos mentales en el psiquismo de Jane y le exije a Raven oculte su apariencia antihumana. Tony por su cuenta encierra a Wanda en la mansión de los vengadores resguardada por Visión.

En ambos casos estas mujeres serán liberadas por los lideres opuestos a estos patriarcas: Erik libera a Jean, Raven dejará a los X-Men para unirse a la Hermandad de Mutantes y Steve libera a Wanda. En estos casos, Magneto y Capitán América se revelan ante el sistema y se niegan a acatar la represión institucional apoyando a Jean y a Wanda a asumir su máximo potencial y unirse a sus filas de forajidos (outlaws).

El Profesor X mantiene esta postura represiva como política de educación en su escuela de mutantes. Regresando a Foucault, Charles Xavier es el educador que pretende domesticar los instintos y dominarlos a favor de un bien mayor. Desde este paradigma, lo que hace con Jean es de una violencia colosal. Utiliza su propio poder para generar bloqueos en la mente de su discípula y jugar con sus memorias y su identidad. La vuelve prisionera de su propia mente, lo cual tendrá terribles consecuencias (en otro post trabajaré ampliamente al personaje de Jean Grey). La manipulación mental de la mujer para convencerla de tener miedo a sí misma y sus capacidades es la más vil articulación del patriarcado. Convencer al esclavo que lo mejor es someterse al amo porque no podrá sostenerse solo es un ejercicio de poder que atenta contra la identidad del otro de manera aplastante.

En cuanto a estas técnicas de educación Tony se diferencia dramáticamente de Charles. Si bien en Civil War reprime a Wanda (y habrá que entenderlo como un episodio único en el que Tony se siente inmensamente culpable), históricamente se define por atisbar el fuego de sus compañeros como lo hizo por ejemplo con Bruce Banner en Avengers (HULK: Ser un vengador: El encuentro con Tony (parte 3 de 5)) o con Spiderman en la misma Civil War (SPIDERMAN: Un gran poder conlleva una gran responsabilidad (2 de 4)). El liderazgo de Tony es en general más liberal que conservador. Desde su propia arrogancia, Stark busca que sus compañeros sean auténticos y francos como él, rayando a veces en cinismo y prácticas riesgosas como invitar al adolescente Peter Parker a Berlín a combatir a Capitán América y su equipo.

Charles busca ser cauto y precavido, mientras Tony es arrogante y atrabancado. Stark destaca por su impulsividad y su exceso de seguridad basado en su soberbia. Estos rasgos lo hacen una inspiración para sus adeptos a quienes siempre trata como iguales (a pesar de su narcisismo). Charles por su cuenta se coloca ante sus discípulos como un maestro que busca enseñarles el camino y por lo tanto pretender saber lo correcto. El Profesor X representa el liderazgo tradicional del patriarca que guía desde un lugar de superioridad moral. Ironman por su cuenta es un líder neoliberal que establece una relación de equidad con sus seguidores exaltando sus capacidades.

MUTANTES: Genealogía de una Moral entre la Soledad y la Pertenencia

Foto 31-08-19 19 24 44La primera publicación de X-Men aparece en septiembre de 1963. Stan Lee llevaba apenas un año dando rienda suelta a su genio creativo con las historias que quería contar. Los 4 Fantasticos, Hulk, Ironman y Avengers ya estaban en circulación. Stan quería desarrollar una historia que tratara los temas de discriminación y derechos humanos que generaban polémica en ese tiempo. Originalmente quería nombrar la serie “Mutantes”. El nombre fue rechazado y opto por X-Men, siendo la X un homenaje a Malcolm X. La esencia de los mutantes consiste en presentar una serie de personajes que son distintos y por ello son discriminados, perseguidos y temidos. Dentro de este grupo habrá quienes busquen demostrar su respeto por la humanidad y bajo el liderazgo de Charles Xavier (personaje inspirado en Marthin Luther King) convertirse en héroes; y habrá quienes llevados por el resentimiento resultado del maltrato y la discriminación sufrida quieran destruir a la humanidad conformando una Hermandad de Mutantes dirigida por Magneto (tributo a Malcom X).

La inspiración de Stan Lee para crear a los Mutantes se sostiene a lo largo de los 50 años que los X-Men han permeado en las representaciones sociales. En la actualidad, todo grupo que haya sido discriminado puede identificarse y abanderarse desde las historias y los personajes de la serie X-Men. Fieles a su origen, los dibujantes y escritores de los cómics así como los guionistas y directores de las películas que conocemos actualmente han continuado problematizando temas como la diferencia racial, étnica y socio-cultural, así como la identidad de genero y la diversidad sexual.

120664

Ninguna otra historia nos muestra con tal claridad el nihilismo Nietzscheano y una genealogía de la moral. Los mutantes son una raza distinta a la humana, han mutado, evolucionado. Su diferencia los hace amenazantes provocando miedo y rechazo. Estas reacciones los llevan al aislamiento, a sentirse ajenos y rechazados con el sufrimiento que eso implica. Charles Xavier reconoce esto y decide dedicarse a buscar mutantes y ofrecerles un hogar, una familia, un lugar de pertenencia y una identidad. Funda su escuela donde decide que para proteger a los mutantes es importante ocultar su mutación y pretender ser normales (en otro post trataré el conflicto que esto implica). Con la fachada de una escuela para niños superdotados (que requieren educación especial) desarrolla un proyecto encubierto de superhéroes.

tumblr_mfdm0v5yLY1rmdazvo1_500Erik Lehnsherr por su cuenta, no tuvo la fortuna de nacer en las condiciones favorables que tuvo Charles. Xavier es heredero de una familia acomodada, sus padres fueron científicos y él tiene acceso a la educación privilegiada. Charles representa el hombre blanco, heterosexual, angloparlante y adinerado (en otro momento abordaré el conflicto de la llamada “white guilt” – concepto que surge de los estudios post-coloniales –  que actualmente aqueja a ciertos sectores de las poblaciones históricamente privilegiadas). Erik en contraste, proviene de una familia judía que vivió la persecución Nazi y cuyos padres fallecieron en los campos de concentración. Su historia es una historia de perdidas traumáticas. Sus padres (asesinados por los Nazis), una hija (Anya, fallece en un incendio y no puede salvarla), su mujer (quien huye atemorizada por los poderes y la ira de su marido)…. pierde su nombre (originalmente era Max Eisenhardt pero cambia su identidad a Erik Lehnsherr). Erik representa al hombre marginado Foto 31-08-19 19 12 19perteneciente a las minorías discriminadas y maltratadas que desarrolla un odio con deseos de venganza. Magneto funda la Hermandad de Mutantes para proteger a los suyos al igual que Charles. La diferencia radica en que Erik no está dispuesto a esconderse ni a proteger a la raza que ultrajó a los suyos, al contrario, busca destruirlos.

Charles y Erik comparten el ser mutantes. Pero uno se aboca al “bien común” buscando una negociación pacífica con los humanos colocándose como “El Bueno” mientras el otro se aboca al “bien propio” que conlleva la destrucción del humano como enemigo colocándose como “El Malo”. La brújula moral de cada uno claramente esta marcada por su historia. Las vueltas de la trama invertirán en su momento las perspectivas de lo bueno y lo malo en las acciones y decisiones de ambos personajes con las consecuencias de sus liderazgos (trabajaré estos contrastes en los posts subsecuentes). Pero sus acciones y su ética estará siempre marcada por sus experiencias individuales.

Imagen1.jpg

Francisco Pereña es un psicoanalista español que escribe un libro titulado “Soledad, Pertenencia y Transferencia”. En este texto desarrolla una serie de conceptos alrededor de cómo el psiquismo humano está siempre alienado de su propio cuerpo provocando una experiencia de soledad y alienación que nos arroja a la necesidad de pertenencia. Como animales sociales, los humanos nos debatimos entre nuestros instintos y el deseo de formar parte de un grupo. Según Pereña, la necesidad de pertenencia surge de la primera experiencia de vida en la cual el cachorro humano se encuentra en un estado de desvalimiento tal que sin un prójimo que lo asista no sobreviviría. Su cuerpo es fuente de dolor y displacer, mientras que la satisfacción de sus necesidades (vitales y afectivas) se encuentran en el cuerpo del Otro. Ese es el origen de la alienación y del sentimiento de soledad en el cuerpo propio. Desde esta perspectiva, la pertenencia es un requisito para la superviviencia. Esto ayuda a entender la insistencia del humano por ser parte de un grupo de mas humanos.

El primer grupo de pertenencia es en teoría la familia. Grupo consanguíneo donde el cachorro humano debería sentirse protegido y parte de ya que se comparte una información genética. En condiciones adecuadas, los padres ven en el hijo una extensión de si mismos y en tanto espejo narcisista, lo acogen y buscan hacerlo “a imagen y semejanza”. Será una labor posterior del sujeto independizarse de los preceptos que los padres le hereden, pero de inicio los deseos de los padres sobre el hijo dan el arranque para una vida afectiva erotizada. Si esto no ocurre, el cachorro queda a la deriva ante un mundo hostil construyendo una imagen de si mismo alienada. Le será complicado entender los códigos de otros humanos y por lo tanto sentirse perteneciente. De estos preceptos deriva la importancia de la crianza temprana y el apego. Un cachorro que no recibe de sus cuidadores (padres o cualquier individuo experimentado que lo asista) tendrá dificultades posteriormente para interiorizar los códigos humanos que nos permiten identificarnos con otros y sentirnos acompañados.

94ade128a8b95381b621b4a90b8dd91a622777cd_00Los grupos secundarios de pertenencia son la sociedad, la cultura y el Estado. Cuando la familia falla (como ocurre con algunos mutantes en los cómics, y con ciertas poblaciones vulnerables en la realidad), estos grupos pueden actuar en el rescate del individuo alienado. Xavier y Erik ofrecen a sus mutantes esta segunda acogida formando con ellos sociedades y familias. Algo similar vemos en casi todas las asociaciones heróicas de Marvel. Avengers por ejemplo son también un grupo que acoge a los personajes alienados que en sus propias historias no habían encontrado un lugar. Se vuelven familia. En la vida real vemos como las llamadas poblaciones marginadas buscan agremiarse para pertenecer a colectivos en los cuales puedan identificarse y gestar una identidad.

El mundo de los cómics ofrece también un espacio familiar. Una comunidad donde podemos convenir e identificarnos con nuestros amados personajes para sentirnos menos solos, más comprendidos… pertenecientes.