Por fin se estreno Avengers: Endgame y con él la esperada conclusión de una saga mitológica que inició hace 11 años. En los posts previos, he trazado el análisis de los personajes que conforman el Universo Cinematográfico Marvel (***ver links al final del texto). Para cerrar el ciclo, trabajaré al verdadero protagonista de la saga: Thanos, el Titan Loco, antes de publicar el capítulo final de cada personaje.

Como otros personajes analizados anteriormente, el personaje de Thanos en el cómic tiene distinciones importantes con el personaje de las películas que amerita ser tomado en cuenta ya que las películas no nos dicen gran cosa de su origen.

Si bien su primera aparición es en 1973 en Iron Man Vol. 1, #55, su historia de origen aparece hasta el 2013. Thanos pertenece a una raza llamada lo Eternos y nació en el planeta Titan. Su familia se compone de sus padres, A’Lars y Sui-San y su hermano Eros AKA Starfox. Los eternos son una raza creada al inicio del universo como protectores del mundo (creación de Jack Kirby en 1976, claramente influenciado por el poema de Hesiodo sobre las edades del hombre y las razas de la antigua Grecia). Thanos nace con una mutación producto del gen Deviante (raza “contraria” a los eternos, maligna y caótica) que le da una apariencia monstruosa. Su madre al verlo se horroriza y pide que lo maten. El padre lo impide estableciendo un vínculo con su hijo desde el primer momento. Thanos crece con el amparo del amor de su padre y el refugio de la ciencia, tratando de encontrar el origen de su mutación.

En sus años escolares conoce a una chica sin nombre que reiteradamente lo aconseja. Posteriormente sabremos que se trata de la Muerte, quien solo se le aparece a él y lo seduce y aconseja para convertirse en un sádico asesino. En un inicio mata animales con fines científicos, pero poco a poco su sadismo escala hasta que comete el primer asesinato en Titan (por las características de la raza de los Eternos, el homicidio entre ellos nunca había ocurrido). Finalmente asesina a su madre y huye. Se vuelve pirata, copula con mujeres de distintas especies, abandona a todas, se encuentra a la deriva viviendo una vida de violencia hasta que regresa a Titan y en la tumba de su madre se le aparece nuevamente La Muerte y le revela su identidad. Thanos le confiesa su amor y ella, burlándose de sus sentimientos, le exige una serie de pruebas para cortejarla empezando por el asesinato de sus hijos y sus mujeres. Las demandas de La Muerte exigirán a Thanos eventualmente el exterminio de los mundos para lograr su amor.

El nombre de Thanos refiere en si mismo a lo mortífero. Su dualidad con su hermano Eros apela a la clásica lucha entre la vida y la muerte ampliamente tratada en psicoanálisis. Como además Thanos (que ya esta nombrado desde la muerte) busca cortejar a la Muerte personificada en mujer, no hay cabida para una verdadera ambivalencia entre vida y muerte, amor y odio ya que su amor a la vida lo condena a la muerte.
Tratando a Thanos como un caso clínico, lo primero que podemos suponer es que su madre presenta una depresión o psicosis post-parto a partir de la cual no solo rechaza a su hijo sino que lo desea matar. ¿Qué ocurre ahí? ¿Cómo podemos pensar la construcción de un psiquismo ahí donde la primera experiencia con el mundo es el rechazo materno y el deseo infanticida? Freud plantea que el cachorro humano nace en un estado tal de desvalimiento que para sobrevivir requiere de un individuo experimentado que lo asista. Este momento mítico traza el arrojamiento del ser al mundo en el abismo de una existencia que sin el acogimiento de un otro genera un vacío que como agujero negro amenaza con succionar la vitalidad. Sin mirada deseante no hay sujeto. Sin erotización del otro no hay cuerpo, solo trozos de carne. En el caso de Thanos, el rechazo de su madre signará su existencia con una huella de objeto hostil asesino con el cual quedará identificado. Si bien el padre lo acoge y lo significa, la huella materna le regresa en la imagen alucinatoria de la Muerte. Desde una perspectiva clínica, Thanos es un sujeto psicótico, que si bien busca en sus primero años de vida aferrarse a las representaciones vitales y amorosas que lo vinculan con el padre (la ciencia y la tecnología), el rechazo y la burla constante por lo aspecto le reiteran la alienación de su nacimiento y lo condenan a la monstruosidad. La primera aparición de La Muerte ocurre en el contexto de un supuesto accidente en una caverna donde mueren todos sus amigos devorados por lagartos, lo cual lleva a Thanos a matar por primera vez a estos animales en venganza por comerse a sus amigos y dejarlo solo. Es su primer brote psicótico. En la alucinación, la barrera de estímulos se diluye y la realidad se confunde con la fantasía. Los objetos malos internalizados (portadores del instinto de muerte) se proyectan en estos animales que devoran vorazmente a los objetos buenos (sus amigos). Dado que Thanos los llevo ahí instigado por la Muerte, podemos inferir que él mismo los mató en un brote psicótico. Parece ciencia ficción, sin embargo, quienes han trabajado la clínica de la psicosis saben que la realidad suele superar la ficción.

Por otra parte, el personaje del MCU (posiblemente por el público infantil y adolescente al cual esta dirigido) carece de la locura sanguinaria de su referente en el cómic. Su primera aparición en la saga cinematográfica es en Avengers, revelando que él es quien ha orquestrado el ataque a la Tierra, utilizando a Loki para conseguir el Teseracto. A partir de esta aparición, Thanos será un observador distante de las historias que ocurren en la Tierra (con los Avengers) y en el espacio (con los Guardianes de la Galaxia y Thor). A través de los años nos fue quedando claro que Thanos, como la muerte, observa y espera trazando las lineas de un guión desconocido para los demás. Como Thor lo indica en Era de Ultron:
alguien juega un juego muy complejo y nos trata como peones,
aludiendo a la clásica referencia de los dioses jugando con los humanos como piezas de ajedrez. Es Thanos quien mueve los hilos de la trama para culminar en Infinity War.
Sin conocer sobre su origen, lo que se nos presenta en las películas es una postura en la cual Thanos cree hacer lo correcto al aniquilar a la mitad de los seres vivos en el universo en un afán de equilibrar la vida. Es el discurso de un tirano que justifica la muerte por un bien mejor. Sistemáticamente Thanos racionaliza su genocidio diciendo que los sobrevivientes viven en abundacia y no padecen de carencias. El lo llama piedad ya que la aniquilación del 50% de la vida implica una selección aleatoria que no discrimina razas, géneros o clases sociales. Es la más terrorífica ejecución de la equidad. Su aparente trauma de origen consiste en que cuando su planeta natal, Titan se ve amenazado por la sobrepoblación, el sugiere la eliminación de la mitad de los seres vivos para recuperar el equilibrio del ecosistema. Obviamente es tratado como un loco y toda sus civilización perece. A partir de esto se promete a si mismo no permitir que ningún otro planeta se destruya de esta forma por lo que vuelve su causa el aniquilar la mitad de todos los mundos del universo con el afán de equilibrar la vida. La muerte (Thanos) equilibra la vida.

Podemos interpretar a Thanos como psicótico también pero instalado en un delirio de grandeza desde el cual su juicio está claramente alterado. El discurso megalomaníaco es típico de muchos líderes tiránicos en la historia de la humanidad. Los grandes dictadores del siglo XX han tenido estas características. Cuando vemos en las películas a los hijos de Thanos, miembros de la Orden Obscura es inevitable relacionarlos con los predicadores de un mesías que propagan este discurso:
“¡Escúchenme y alégrense!, tuvieron el privilegio de ser salvados por el gran titán. Pueden pensar que esto es sufrimiento. No… Es la salvación. Las escalas universales se inclinan hacia el equilibrio debido a su sacrificio. Sonrían… Porque incluso en la muerte, se han convertido en hijo de Thanos.”
Congruente con este discurso, Thanos espera ver “el amanecer de un Universo agradecido”. Al final de Infinity War, lo vemos con la pequeña Gamora quien le pregunta si lo hizo y a que costo, y él responde con tristeza infinita: “me costo todo”.

A diferencia del personaje del comic, enajenado con La Muerte, el Thanos del MCU logra mantener un vínculo entrañable con su hija adoptiva Gamora a quien ama y sacrifica para obtener la gema del Alma y así lograr su misión. Esta acción lo pone en una posición de sacrificio heróico y que al igual que casi todos los Avengers, él también tiene que perder lo que mas ama por un bien mayor.
****links:
IRONMAN: La construcción de una coraza narcisista para lidiar con el trauma. (1 de 4)
HULK: Ser un vengador: El encuentro con Tony (parte 3 de 5)
CAPITÁN AMÉRICA: Masoquismo e Identidad (1 de 4)
THOR: El príncipe berrinchudo o “his Majesty The Baby” (1 de 4)
BLACK WIDOW: Monstruosidades Femeninas; del Horror al Deseo (1 de 4)
Figuras Paternas: Hawkeye y Nick Fury