Toda historia de superhéroes tiene supervillanos. En nuestras mitologías contemporáneas, la maldad se representa en monstruos, máquinas, seres despiadados y claro, enfermedades que se salen de control y des-humanizan a los humanos. En todo guion de ciencia ficción las virtudes de la humanidad son exaltadas mientras los componentes destructivos son referidos a la periferia de lo monstruoso. La pandemia del COVID19 parece salido de un guion de película. Resident Evil, Terminator, Matrix….. Crisis en Tierras Infinitas….. Avengers, Endgame…. En todas estas películas (por nombrar solo algunas), el mundo se ve amenazado con la extinción y en el momento más duro de desastre, los héroes aparecen para “salvar el día” porque los humanos merecen sobrevivir. En los guiones de ficción el bien y el mal son relativamente claros. El héroe y el villano se distinguen con alguna claridad…. pero en la vida real….
¿Donde están los héroes ahora? ¿Quién es el villano?
Toda mitología confronta los valores del bien y del mal. Para los griegos, la lucha era entre el orden y la justicia (Dyke) contra el caos y el exceso (Hybris). Los héroes griegos buscan instaurar la civilización racional frente al desorden del pathos (pasión-enfermedad). En el antiguo testamento, el Dios Jehová disciplina a los humanos en los valores del pueblo elegido. Los héroes del pueblo de Israel deben combatir las tentaciones que los llevan a apartarse del camino de Dios. El mal se encarga en el enemigo de Dios. En el medievo, la figura de Jesucristo representa el héroe máximo que se sacrifica por la humanidad e instaura los valores del catolicismo. La hegemonía del mal queda colocada en el personaje del Diablo con sus diversas representaciones. La noción del pecado, la culpa y el castigo articularon un nuevo orden de valores.
En la modernidad, el capitalismo se consolidó como el sistema que ofrecía el paraíso en la tierra ante la muerte de Dios. El comunismo en contraparte fue el depositario de la maldad. La segunda guerra mundial y la guerra fría se encargaron de mantener la ficción de dos bandos opuestos. Las mitologías contemporáneas corresponden a esta época. Hacia finales del siglo XX el terrorismo sustituyó al comunismo y el neoliberalismo se consolidó amenazando con consumir al planeta…..
Desde esta narrativa, hay quienes piensan que es tiempo de la naturaleza de cobrar facturas. En un guion al estilo de Matrix, el humano y el sistema capitalista neoliberal son la verdadera enfermedad. El virus es entonces una forma en que la naturaleza cobra venganza (en una versión renovada de la ira del Dios del antiguo testamento) o bien un mecanismo de balance natural (desde una perspectiva Darwiniana donde sobrevivirá el más apto). Se trata de la solución piadosa de Thanos en Endgame….. Eliminando a la mitad de la población, la tierra reflorece.
Otra interpretación de la crisis actual apunta a la crítica al sistema capitalista y la villania de los estados despóticos que han invertido los recursos del pueblo en milicia, inversiones, privatización en vez de asegurar la salud. El estado en este sentido falla como garante de la seguridad de la ciudadanía. El capitalismo es el asesino. Los héroes ante la crisis son el personal médico que literalmente arriesga su vida para combatir la enfermedad y restablecer la salud.
Apenas el año pasado, Avengers: Endgame nos dio una lección sobre la capacidad de resiliencia de los superhéroes ante el fracaso de Infinity War. Ahora nos toca a nosotros enfrentar esa capacidad resilente para enfrentar el fracaso de los sistemas de salud ante la pandemia.
Para revisar distintos tipos de afrontamientos frente a la crisis ver:
STEVE ROGER’s Endgame: Vivir la vida que Tony me decía…
HULK´s Endgame: Monstruosidad sublimada
THOR’S Endgame: El fracaso de un Dios
BLACK WIDOW’S Endgame: El Sacrificio Final
HAWKEYE´S Endgame: Ronin y la venganza
ROCKET’S Endgame: Recuperar a mi familia
NEBULA’S Engame: Culpa y Reparación
SCOTT LANG’S Endgame: Esperanza e ingenuidad.
THANOS’ Endgame: La inevitable mortalidad.